La del espejo?

 | 2 de septiembre, 2024

Sin título.

Le volví a sonreír a la que veo en el espejo. Me costó entenderla, la miraba con desprecio y a veces hasta con lástima... Pero empecé a analizar sus razones y sus luchas y mierda que me sorprendió.

Nunca fue la débil que creí que era, la veía llorar mares sin hacer más que taparse la cara, quizás se avergonzaba de que la esté mirando.

En algunas otras ocasiones la veía gritar y agarrarse la cabeza. Me miraba y yo podía ver la angustia en esos ojos hinchados y cansados, me miraba pidiendo ayuda.

Entonces empecé a observarla, a descubrir qué causaba ese dolor y también qué cosas le hacían bien. A veces no quería molestarla y esquivaba todos los espejos que se cruzaban, presentía que no estaba bien ni a gusto con mi visita, aunque también había días donde sin importar cuál fuera el sentimiento, me paraba nuevamente frente al espejo, sin saber con qué me iba a encontrar.

Y ella me esperaba, esperaba ansiosa que a pesar de los malos días, yo igualmente me pare frente a un espejo... En cierto momento, nos empezamos a entender.

Aún no pudimos hablar más que alguna pregunta retórica de "¿Qué estás haciendo?", pero ya comenzamos a sonreírnos cuando nos vemos.

Sin importar cuáles sean los sentimientos, nos saludamos con una sonrisa, haciéndonos saber que siempre vamos a estar una para la otra... Siempre y cuando haya un espejo.